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Jatropha-pastos y forrajes
Yolai Noda
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Valor nutricional y producción de los principales cultivos forrajeros en el cantón Guaranda – Bolívar - Ecuador
Franklin Román Cárdenas
Tesla Revista Científica
El valor nutritivo del pasto depende de su composición, consumo y aprovechamiento por parte del animal. Si un pasto tiene una buena composición pero no es consumido, su valor alimenticio es nulo. La materia seca del pasto contiene nutrientes esenciales como carbohidratos, grasas, proteínas, minerales y vitaminas necesarios para el metabolismo animal. La nutrición es crucial en los sistemas de producción con rumiantes, ya que el potencial productivo de un animal solo se expresa si se satisfacen sus necesidades de mantenimiento y hay un excedente disponible. Las pasturas naturales o mejoradas son la base de estos sistemas de alimentación. Es importante implementar acciones para mejorar de manera sostenible la productividad de los sistemas de alimentación, aumentando la producción de leche y manteniendo un equilibrio entre los recursos aprovechables en el proceso. El manejo del pasto juega un papel fundamental en la producción de ganado vacuno de carne y leche, y requiere estrategias p...
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Producción de forraje en sorgo y mijo: variables de crecimiento
JAIME RUIZ
Agronomía Mesoamericana, 2013
En la región de los valles centrales de Oaxaca, debido al incremento de los hatos ganaderos y a la inci-dencia frecuente de sequías, se estima un déficit anual de más de 300.000 t de forraje. La deficiencia más crítica ocurre en el período primaveral, dada la ausencia de lluvias y a la escasez de agua para riego (López et al.
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Emisiones en la producción de forrajes de las explotaciones lecheras
Gregorio Salcedo
Informacion Tecnica Economica Agraria, 2020
Los objetivos del presente trabajo fueron los de estimar las emisiones en la producción de forrajes de las explotaciones lecheras de Cantabria y su huella de carbono, considerando el uso indirecto de la tierra y el potencial secuestro de carbono de los restos vegetales y del purín. Sesenta explotaciones de vacuno lechero de Cantabria fueron clasificadas en tres modelos forrajeros: i) Pradera (P); ii) Pradera-Maíz (PMz) y iii) Pradera-Maíz-Cultivos Forrajeros de Invierno (PMzCFI), para estimar los gases de efecto invernadero de los forrajes. Los cultivos forrajeros fueron hierba de pradera en pesebre (HPP); ensilado de hierba (EHM) y raigrás italiano (ERM) en microsilos; ensilados de hierba (EHT) y maíz (EMz) en trinchera. Las emisiones de P, PMz y PMzCFI fueron 1519, 1851 y 2382 kg CO2eq ha-1, respectivamente; de ellas, el 20,1 % proceden de las operaciones de cultivo; 9,2 % de los consumibles y 70,6 % del suelo. Las emisiones de los forrajes dentro de la superficie que ocupan en una hectárea fueron 515 kg CO2eq para HPP, 886 kg CO2eq para EHM, 774 kg CO2eq para EHT, 747 kg CO2eq para EMz y 678 kg CO2eq para HPP. Los restos vegetales aportaron 2866 kg MS ha-1 y 3769 kg el purín, equivalente a 4580 kg C con un potencial de secuestro de carbono de 458 kg. En general, la huella de carbono de cada modelo forrajero sin secuestro de carbono fue 0,219; 0,257 y 0,271 kg CO2eq kg-1 MS en P, PMz y PMzCFI, respectivamente, y entre forrajes de 0,189; 0,266; 0,232; 0,223 y 0,395 kg CO2eq kg-1 MS para HPP, EHM, EHT, EMz y ERM respectivamente. Estos últimos se redujeron hasta 0,0075; 0,069; 0,036; 0,025; 0,17 kg CO2eq kg-1 MS para HPP, EHM, EHT, EMz y ERM respectivamente, al considerar el secuestro de carbono. El manejo del nitrógeno fue la variable mejor relacionada incluyendo o no el secuestro de carbono. Se concluye señalando que las emisiones por hectárea aumentan con la intensificación, pero disminuyen por kilogramo de materia seca producido. Reemplazar el uso de microsilos (EHM y ERM) por los de trinchera en hierba (EHT) puede ser una opción de mitigación, con emisiones similares al EMz. El cálculo de la huella de carbono debe considerar como sumidero a los restos vegetales y el purín, quienes pueden contribuir compensando el 80 % del total de carbono emitido en la producción de un kilogramo de materia seca.
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Dinámica De La Producción De Pasto y Balance Forrajero De Un Módulo De Vacas Lecheras, en La Sierra Central
PERCY AVALOS
Anales Científicos, 2015
Resumen Se condujo un experimento para estudiar la dinámica forrajera, y el contenido de proteínas y energía de una pastura con el propósito de conocer el balance forrajero para un módulo de vacunos lecheros pastoreando una asociación de ryegras-trébol. El área de estudio estuvo localizada a 4200 msnm en Conocancha, SAIS Pachacutec, Junín. La tasa de crecimiento del pasto, y la temperatura y humedad del suelo fueron medidas mensualmente usando jaulas, lapiacos, cuadrantes y termómetros medio-ambientales. Se empleó el análisis Micro-kjelhdal para determinar el contenido proteico del forraje; mientras que la energía metabolizable (EM) fue estimada a partir de la digestibilidad in vitro de la materia orgánica (DIVMO) aplicando la ecuación EM (MJ/KgMS) = 0.16 x DIVMO (MAFF 1975, citado por Geenty et al., 1987). El balance forrajero fue diseñado con la información anual de la tasa de crecimiento y contenido energético del forraje, y el nivel de producción de leche. Los resultados fueron analizados bajo un diseño completo randomizado con un arreglo factorial de 6 x 2, y la diferencia de medias fue detectada con la prueba de Duncan a un nivel de probabilidad de 0.05 (Calzada 1982). Los resultados revelaron la Dinámica forrajera: los mayores niveles de temperatura y humedad fueron registrados en la estación de verano, lo mismo ocurrió con la tasa de crecimiento del pasto. La temperatura (11.4 o C) siempre estuvo por encima del mínimo requerido (10 o C) para fomentar el crecimiento de la asociación; por otro lado, la humedad del suelo (28.2%) no registró niveles cercanos a la capacidad de campo (60%). La tasa de crecimiento promedio fue 24.7 KgMS/ha/día en contraste a 31.5 KgMS/ha/día encontrado bajo condiciones neozelandesas (Geenty et al., 1987). Contenido de proteína y energía del forraje: la proteína cruda (PC) en base seca fue en promedio 17.1%, mostrándose superior al 10% mínimo requerido para las dietas de vacas lecheras al pastoreo. El nivel de energía del pasto (7.2 MJ/KgMS) fue menor al mínimo requerido (10 MJ/KgMS, según Bojorquez 1989). Balance forrajero: se registró un déficit forrajero sólo en los meses de abril y julio, y un exceso durante el resto del año. La capacidad de carga potencial promedio fue 2.28 vacas/ha/año, siendo 161% mayor a la carga actual (1.39 vacas/ha/año).Se concluyó que el factor limitante de la producción de leche bajo las condiciones del estudio es la baja energía del forraje; debido a la aplicación de una reducida capacidad de carga, que origina la acumulación de material muerto e inhibición de la tasa de crecimiento. Se recomienda implementar un sistema de manejo de la pastura que involucre el planeamiento de la rotación de potreros con el número de vacas, y el momento y días de permanencia adecuados, con el objeto de maximizar la tasa de crecimiento del forraje y la ingestión de pasto por parte de las vacas; lo que influenciará positivamente sobre la producción de leche y vida útil de la pastura. Palabras claves: balance forrajero, crecimiento de pasto, energía y proteína.
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Relación entre los recursos forrajeros y la producción lechera en el contexto de la agricultura familiar en la provincia de Darién, Panamá
Edwin Pile
Roberto Carrizo, 2021
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Producción de forraje de especies y cultivares de leguminosas en valles regados norpatagónicos
Daniel Pedro Miñón
2013
Producción de forraje de trébol frutilla (Trifolium fragiferum L.) cv. Lucila bajo riego en valles norpatagónicos.
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Pasturas forrajes-2009
fede abel
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Producción y utilización de pastizales en la región Interandina del Ecuador
jorge grijalva
1995
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Producción de forraje y carne en pastizales resembrados con gramíneas introducidas
Mario Cano Coronado
Revista Mexicana de Ciencias Pecuarias, 2001
Esqueda CMH, Carrillo RRL. Tec Pecu Mex 2001,39(2):139-152. Weeping (Eragrostis curvula (Schrad.) Nees) and Wilman lovegrass (Eragrostis Lehmanniana) are introduced grasses from South Africa, that have been well adapted to northern Mexico. The potential for forage production of these grasses is good. Due to these characteristics in addition to others, these species are an alternative for the livestock industry. The objective of this study was to compare animal response on (1) a short grass prairie, (2) seeded weeping lovegrass, and (3) seeded Wilman lovegrass. The research was conducted during the summer in three years. In 1998 and 1999, 220 kg heifers and lactating Hereford cows were used. While in 2000, heifers with an average weight of 150 kg were used. The average daily gains for heifers was 0.6 kg on seeded areas, while in the shortgrass prairie, the average daily gain was 0.45 kg. Lactating cows showed daily gains of 0.3 kg and their calves 0.7 kg on the seeded areas. While on...
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